Ana Frank visitaba algunas veces la casa de los Van Daan, bueno la parte del escondite que les toco, ese día hablo con ellos de Peter el hijo de los Van Daan, quejándose un poco de su comportamiento ya que encontraba a Peter un poco tímido y torpe, y al mismo tiempo trato de justificar ese comportamiento, diciendo que tal vez era porque a esa edad los chicos no están acostumbrados a tratar con chicas.
Ana Frank, se empezaba a llevar muy mal con su mama, últimamente tenían muchos problemas, aunque entre ellas no había gritos como con los vecinos, su hermana Margot y su mama tenían una actitud muy extraña, y consideraba que era una lástima que comprendiera mejor a sus amigas que a su propia mama y además sumándole el mal humor de la señora Van Daan que siempre era muy autoritaria y todo lo que era suyo lo guardaba estrictamente, consideraba que era muy extraño que las personas mayores peleen por cualquier cosa. Ella decía que las peleas era sólo cosa de niños, y tendría que acostumbrarse a ellas, ya que la mayoría de esas discusiones eran por ella, nada de lo que hacía era correcto, su comportamiento, apariencia, modales, y su carácter, todo esto, es motivo de habladurías, criticas y las malas palabras que decían, tiene que aguantarlas y está obligada, aun así a poner buena cara. Ana Frank estaba decidida a demostrarles que ella no era ninguna tonta, y que cuando empezara a decirles que cuiden su educación y la dejen en paz a ella, no dirían nada más.
Las personas que se ocultaban adquirían curiosas experiencias, no tenían bañera, y se lavaban en una tina. Al haber agua caliente en la oficina, todos se turnaban para lavarse, cada uno escogió un rincón personal para bañarse, algunos en la cocina, otros en las oficinas, a partir de la última semana Ana Fran empezó a buscar otro cuarto de baño, Peter le recomendó el w.c. de la oficina, ya que ahí podía sentarse, encender la luz, cerrar la puerta con llave y estar segura de las miradas de los otros.
Ana Frank se asusto mucho, pues alguien había tocado el timbre demasiado fuerte en la noche, lo que le hizo pensar que eran los Nazis, pero cuando todos dijeron que eran unos vagos se tranquilizo, los días trascurrieron en silencio.
Muchos de los judíos han sido embarcados por la Gestop que nos e anda con rodeos, son trasportados en furgones de ganado a Westerbork, en Drente, que es el gran campo para los judíos, este lugar debe ser una pesadilla; muchos de ellos están obligados a lavarse en un solo cuarto, y casi no existen los w.c. Duermen amontonados unos sobre otros en cualquier lugar. Duermen juntos hombres, mujeres y niños, y desafortunadamente muchas de ellas están embarazadas.
No hay escapatoria. La gran mayoría está marcada en el cráneo, que se encuentra afeitado, y otros, además, por su tipo de judío.
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